En las comunidades recónditas de Nicaragua, la falta de los medios independientes obliga a los residentes a escuchar las emisoras afines a Daniel Ortega.
Por Houston Castillo Vado | @VozDeAmerica
Libertad de prensa
León, Nicaragua
Isabel Hernández se entera de las noticias que ocurren en el departamento de León -al norte de Managua- cuando viaja a la ciudad para comprar la comida de la quincena.
En la comunidad rural donde habita, las personas de la localidad escuchan las noticias en radio con baterías, ya que aún no tienen acceso a energía eléctrica, pero las opciones para informarse con variedad, se han reducido en su totalidad.
"A veces hasta que vamos a la ciudad nos damos cuenta de cómo está la situación. Ahora no sabemos nada porque no hemos podido ir a la ciudad… no nos damos cuenta de lo que sucede", dice la mujer a la Voz de América, mientras hala agua de un pequeño molino artesanal que existe en la localidad.
Hernández al igual que el resto de los habitantes de la zona desconocen por ejemplo lo que pasó con Radio Darío, una de las emisoras más antiguas que quedaban en pie en Nicaragua y cuya frecuencia abarcaba el Occidente del país, conformado por los departamentos Chinandega y León.
En el lugar donde las fuentes hablaron, los habitantes son pocos, pero todos tienen algo en común: se informan de las noticias con radios. En esta pequeña localidad perteneciente a León viven un poco más de 100 personas, no obstante la ciudad a la que pertenece esta comunidad es amplia.
De hecho según el último censo oficial del Instituto de Información de Desarrollo (INIDE), León es el cuarto departamento con más pobladores en Nicaragua, con un poco más de 300 mil habitantes distribuidos en diez municipios.
En dichos municipios penetraba Radio Darío, una de las emisoras más antiguas del país, pero los lugareños en la zona cuentan que desde hace días dejó de sonar en sus radios desconociendo que fue cancelada por el gobierno de Daniel Ortega, al igual que otros 16 medios de comunicación más en los primeros quince días de agosto.
-¿Se enteró que cancelaron Radio Darío?-
-Ah, ¿por eso es que no se escucha?-, respondió a la VOA una señora de 69 años que buscaba dicha frecuencia en un deteriorado radio que tiene en su humilde vivienda. "Solo hay un ruido estridente, nada más".
En lugar de Radio Darío, la señora ha sustituido la emisora por una oficialista cuya señal dice que llega "con nitidez".
"Cuando hay temblor pongo Radio Ya (una emisora afín a Daniel Ortega) y está dando la alarma de última hora. Por medio de la radio nos damos cuenta de lo que pasa aquí", dijo la señora que ha optado por otras frecuencias oficialistas.
León, la "capital de la revolución sandinista"
Las emisoras críticas a Ortega han sido liquidadas en Nicaragua una a una y Radio Darío no fue la excepción. Su sede estaba en el centro de León, un bastión del sandinismo que cataloga a la ciudad como "la capital de la revolución", razón por la cual consideran que la emisora "era un enemigo".
En 2018 Radio Darío fue objeto de un "atentado terrorista" a como lo catalogó en su momento su director Anibal Toruño tras ser incendiada. El personal se encontraba dentro y lograron salir despavoridos del lugar, por lo que su localidad fue cambiada a otro punto.
TELCOR, el ente regulador de las telecomunicaciones, dirigido por Nahíma Díaz, sancionada por Estados Unidos, alegó que la emisora crítica a Ortega había violado varias cláusulas como el cambio de localidad donde estaba su sede.
"Sus estudios de transmisión en la dirección… no corresponden con la autorizada en la licencia", dice la resolución de TELCOR.
Anibal Toruño, director de Radio Darío señala que la decisión fue orientada "por Rosario Murillo y por Daniel Ortega porque ellos sabían que la sede fue quemada".
En el centro de la ciudad, los taxistas resienten las noticias independientes ya que las emisoras que no controla el gobierno, divulgan contenido musical y en donde se emite información es alineada a Ortega.
"La mayoría de tiempo siempre escuchaba los noticieros de (Radio Darío), pero está fuera del aire.. tendría que ver ahora qué emisora escuchar", dijo un taxista que prefirió no ser citado por miedo a represalias.
"Me hará falta porque ahí estaba informado", dijo el hombre.
Según el jefe de prensa de Radio Darío, Francisco Torrez, la única emisora crítica que le hacía competencia al medio que coordina es Radio Mi Voz, esto por el alcance que tiene en las localidades, pero comenta que la emisora quedó con programación de corte cristiano, aunque dice que tienen un noticiero, "en donde omitieron todos los temas que tienen que ver con la coyuntura política de Nicaragua".
Apagón en toda Nicaragua
En el resto de Nicaragua los escasos medios de comunicación independientes que sobreviven y que se rigen por Telcor, han optado por tomar una medida similar a la de la local Radio Mi Voz.
Por ejemplo Canal 10, propiedad del empresario guatemalteco Ángel González, es el medio televisivo más visto de Nicaragua y desde hace meses decidió vetar sus programas políticos.
Wilih Narváez, exreportero de dicho medio, dijo a la VOA que esta empresa "cambió, como todos los medios (de comunicación) que todavía no han sido confiscado por el régimen su línea editorial" y eso significa "el no visibilizar que en Nicaragua hay presos políticos, violación de derechos humanos, sanciones e incluso persecución contra la Iglesia Católica".
"El Canal 10 tiene la mayor audiencia en el país, en su momento hasta el mismo Daniel Ortega lo reconoció. Muchos de los presos políticos que hay actualmente, fueron detenidos cuando salían de dar entrevistas en ese canal", comenta Narváez.
En lugar de temas políticos, en Canal 10 se informan de temas sociales, accidentes de tránsito y de política solo conservan las comparecencias de Daniel Ortega ante la nación, limitados a informes de la Policía, Consejo Supremo Electoral y de otras instituciones.
Otro medio que tomó una decisión similar fue Canal 12. De hecho su jefe de prensa anunció en redes sociales el fin de su contrato laboral alegando "desacuerdos con su ajuste de política editorial", tras habérsele censurado una entrevista al director del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), Dante Mossi.
La VOA verificó la supresión de temas políticos en ambas televisoras por medio de un monitoreo de varios días. Por ejemplo, la IX Cumbre de las Américas realizada en Los Ángeles, California, en junio pasado, no existió en los canales independientes.
Según el periodista Wilih Narváez, todo lo que ocurre "es un asunto de sobrevivencia" pues "nadie quiere un exilio o perder su empleo y en el peor de los casos tener el mismo futuro de los directivos de La Prensa, que ahora son presos políticos".
"Son decisiones muy duras, y más allá de cuestionar al medio, la audiencia esta clara a qué se debe este cambio. El único culpable de que esto suceda es el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo utilizando sus brazos represivos: Telcor cancelando licencias de operaciones, la Policía confiscando y la Fiscalía fabricando delitos", concluyó Narváez.
El cierre masivo de medios locales en Nicaragua han sido condenados por la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) quienes denunciaron recientemente que el gobierno del presidente Ortega creó "un nuevo desierto informativo en el interior del país".
"Con un solo golpe, el gobierno de Nicaragua creó un nuevo desierto informativo en el interior del país, donde las estaciones clausuradas prestaban un valioso servicio comunitario a miles de personas. Es obvio que se pretende acabar con todo vestigio de prensa independiente", afirmó el presidente de la SIP, Jorge Canahuati.
Suscríbase aquí a El Boletín de COYUNTURA y reciba las noticias de la actualidad de Nicaragua, Centroamérica y el mundo.
Comments