Esta tragedia arroja luz sobre un fenómeno más amplio que afecta a la región centroamericana: la creciente afluencia de migrantes de diversas nacionalidades que buscan ingresar a los Estados Unidos de América, en su búsqueda del llamado "sueño americano". Miles de migrantes, incluyendo venezolanos, cubanos, haitianos y personas de otras nacionalidades, ingresan a Honduras por la frontera con Nicaragua en su ruta hacia el norte, pasando por Guatemala y México.
Por Redacción Central | @CoyunturaNic
Copán, Honduras
Un fatídico suceso ha sacudido las esperanzas y los anhelos de un grupo de migrantes provenientes de diferentes rincones de la región. En las primeras horas de este domingo 15 de octubre de 2023, un autobús repleto de migrantes venezolanos, haitianos, cubanos, y ecuatorianos se convirtió en escenario de una tragedia desgarradora. El vehículo, que se dirigía hacia la frontera de Agua Caliente en el occidente de Honduras, se precipitó en una peligrosa curva y cayó al río Higuito, en la carretera CA-4.
La noticia trascendió con rapidez, con la confirmación de al menos cuatro vidas perdidas en el accidente y múltiples heridos, algunos de los cuales se encontraban en estado crítico y fueron trasladados de urgencia al Hospital de Occidente. Mientras tanto, las operaciones de rescate continuaron hasta las 10 de la mañana, según información verificada por el equipo de COYUNTURA, ya que existía el temor de que más víctimas pudieran estar atrapadas en la chatarra del autobús, sumergido a la mitad en el río.
El suceso ha tenido lugar en un contexto de creciente migración en la región, con miles de desplazados procedentes de Venezuela, Cuba, Haití y otros países, que ingresan a Honduras a través de Nicaragua en busca del esquivo "sueño americano," un viaje que los lleva a cruzar también Guatemala y México, con más peligros y tragedias en la ruta.
El comandante del Cuerpo de Bomberos de la región occidental, Jimmy Orellana, brindó detalles sobre el incidente, explicando que el autobús cayó al río Higuito en la carretera internacional que conduce a Ocotepeque, en un punto crítico del puente, por fallas humanas y/o mecánicas aún desconocidas. En medio de la tragedia, el Cuerpo de Bomberos y socorristas se desplegó, junto a comunitarios locales, con recursos adicionales para asistir en las operaciones de rescate y atención médica de las y los afectados.
Este trágico evento es solo una pequeña parte de la crisis migratoria en curso que afecta a Centroamérica y a la región latinoamericana, que está ganando un nivel alarmante. Según datos del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH), más de 368,000 migrantes irregulares, procedentes de África, Asia, el Caribe y América del Sur y Central, han transitado por Honduras en lo que va del año 2023.
Los números revelan que la gran mayoría de estos migrantes, aproximadamente el 93 %, ingresaron a Honduras por la zona oriental del país, en los municipios de Trojes y Danlí. La nacionalidad de los migrantes varía ampliamente, con un fuerte flujo de venezolanos, cubanos, haitianos, ecuatorianos y colombianos, todos en busca del denominado "sueño americano" en los Estados Unidos de América (EE.UU.) por motivos que van desde lo económico, pasando por lo humanitario, los desastres naturales y la violencia estatal o de la delincuencia organizada.
El presidente de México, Andrés López Obrador, hizo recientemente un llamado a la cooperación internacional para abordar esta creciente crisis. Anunció una cumbre programada para el próximo domingo, 22 de octubre, en Palenque, Chiapas, donde se reunirá con otros líderes de países latinoamericanos para discutir estrategias y soluciones para la crisis migratoria. Entre los países convocados se encuentran Belice, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, Panamá y Venezuela.
El presidente López Obrador ha enfatizado la importancia de abordar las causas subyacentes de la migración y mejorar las condiciones de vida en los países de origen para reducir la necesidad de emigrar. También ha abogado por un enfoque humanitario en lugar de medidas restrictivas, destacando la importancia de ayudar a las personas necesitadas.
Esta cumbre se produce en un momento en que EE.UU. ha visto un aumento en el número de migrantes detenidos en la frontera con México, y cuando se ha establecido un nuevo récord de arrestos en un solo día: 8,940 personas migrantes detenidas el miércoles 20 de septiembre de 2023, según informó Brandon Judd, presidente del Consejo Nacional de Patrullas Fronterizas, a la NBC News. La situación está generando presiones significativas sobre las autoridades fronterizas, lo que subraya aún más la urgencia de abordar la crisis en su totalidad.
México, como país de tránsito y destino para muchos migrantes, está asumiendo un papel crucial en esta crisis y se presenta como un interlocutor clave con países como Cuba y Venezuela. Al mismo tiempo, el Gobierno mexicano pide un mayor compromiso de EE.UU. y otros países para abordar las causas fundamentales de la migración y proporcionar apoyo a los países expulsores de migrantes, días después de que la administración del mandatario Joseph Biden completara la construcción de otro tramo de al menos 27 kilómetros en el muro fronterizo estadounidense y mexicano.
La crisis migratoria no solo plantea desafíos humanitarios y logísticos, sino también un reto para la diplomacia y la cooperación internacional. La magnitud de la situación requiere una respuesta concertada que aborde tanto las necesidades inmediatas de los migrantes, como los accidentes y urgencias suscitadas este domingo, y también las causas profundas de su desplazamiento. Queda por verse si estas reuniones y cumbres lograrán traducirse en acciones efectivas en el terreno y si se podrá dar una respuesta verdaderamente fraterna y digna a la creciente oleada de migrantes en busca de un futuro mejor. La prioridad, sin duda, es garantizar una movilidad segura y digna para aquellos que han emprendido este arduo viaje en busca de esperanza.
Tres víctimas sin nacionalidad identificada; cuarta persona fallecida era hondureño
El Cuerpo de Bomberos realizó el listado de las personas fallecidas y heridas en el accidente de tránsito que se produjo la madrugada de este domingo en Santa Rosa de Copán.
Personas fallecidas:
Yostin Yoel Vásquez Martinez de 19 años de edad; hondureño; su cuerpo fue encontrado en el asiento del conductor
Dos hombres y una mujer sin documento de identificación
Personas heridas que fueron atendidas en el lugar:
Cesar Paredes de 42 años de edad; de Venezuela.
Alexander Parra de 57 años de edad; de Venezuela.
Jarol Pavón de 27 años de edad; de Tegucigalpa, Honduras.
Ramón Guardado de 37 años de edad; de Campamento, Olancho, Honduras.
Witer Josue de 15 años de edad; de Campamento, Olancho, Honduras.
Ana Paguay de 32 años de edad; de Ecuador.
Ayurebis Perez Gómez de 68 años de edad; de Cuba.
Alexander del Valle de 38 años de edad; de Cuba.
Alexander del Valle de 9 años de edad; de Cuba.
Rosmery Rivas de 20 años de edad; de Venezuela.
Indira Varroza de 45 años de edad; de Venezuela.
Antony Esmeraldas de 21 años de edad; de Ecuador.
Jefry Alexander Peña González de 23 años de edad; de Venezuela.
José Gregorio Mayora de 26 años de edad; de Venezuela.
Leonel Girón de 37 años de edad; de Siguatepeque, Honduras (uno de los conductores asignados del autobús).
Roger Bermudez de 43 años de edad; de Venezuela.
Kely Valencia de 26 años de edad; de Venezuela.
Carlos Valencia de 23 años de edad; de Venezuela.
Cleibinson Riasco de 25 años de edad (aproximadamente); de Venezuela.
Enrique Javier Riasco de 25 años de edad; de Venezuela.
Fran González de 37 años de edad; de Venezuela.
María Jimena de 31 años de edad; de Venezuela.
Arturo Puente de 60 años de edad; de Venezuela.
Eduardo Ramones de 25 años de edad; de Venezuela.
Verónica Puente de 9 años de edad; de Venezuela.
Victoria Puente de 11 años de edad; de Venezuela.
Karen Méndez de 30 años de edad; Venezuela.
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