Por ejemplo, las calles de San Pedro Sula, la ciudad industrial de Honduras, ya enfrentan nuevamente severas inundaciones, solo algunos días después de las afectaciones de la tormenta tropical Sara. Varias vías principales están anegadas, complicando la movilidad y obligando a las autoridades municipales a cerrar accesos clave como Jutucuma y Ticamaya. Aunque la construcción de un puente hacia estas localidades está cerca de finalizar, las lluvias de hoy han detenido los trabajos.
Por Redacción Central | @CoyunturaNic
Tegucigalpa, Honduras
El clima extremo domina la actualidad en varias regiones del continente americano, con fenómenos que han generado preocupación y llamados a tomar medidas urgentes para mitigar sus impactos. Desde lluvias continuas y frío en Guatemala y Honduras, hasta la formación de una bomba ciclónica en el noroeste de Estados Unidos de Norteamérica (EE.UU.), las condiciones meteorológicas no dan tregua. El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (INSIVUMEH) informó que un frente frío seguirá causando lluvias y lloviznas en las regiones del norte al centro del territorio guatemalteco, acompañadas de actividad eléctrica en la bocacosta. Las zonas montañosas registran una sensación térmica gélida, mientras que el altiplano central y los valles de oriente enfrentan vientos que oscilan entre los 30 y 35 kilómetros por hora, con hasta 22 grados Celsius de temperatura.
En Alta Verapaz, las lluvias han incrementado el nivel del río Cahabón, lo que ha motivado monitoreos de emergencia por parte de la Cruz Roja Guatemalteca. Ante estas condiciones, el INSIVUMEH recomienda a la población extremar precauciones y abrigarse durante las noches y madrugadas.
Por otro lado, el ingreso de un frente frío ha generado precipitaciones de variada intensidad en el territorio hondureño. Según el Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (CENAOS), las lluvias más fuertes afectan las zonas norte y noroccidental, donde se activaron alertas rojas, particularmente en localidades como Choloma, Lima, El Progreso, Omoa y Puerto Cortés.
El meteorólogo Alberto López, de la Secretaría de Estado en los Despachos de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales de Honduras (COPECO), advirtió que las áreas previamente afectadas por la tormenta tropical Sara están en riesgo inminente de sufrir inundaciones graves debido a que los bordos de contención ya alcanzaron su capacidad máxima. Además, las lluvias acumuladas podrían oscilar entre 180 y 250 milímetros en las próximas horas, con daños considerables en las regiones más vulnerables.
En San Pedro Sula, las lluvias intensas al cierre de este texto ya provocan serias inundaciones en varias arterias viales, dificultando el tránsito de las y los ciudadanos hacia sus lugares de trabajo. Entre los puntos afectados destacan sectores como El Carmen, Felipe Zelaya y el bulevar de la 27 calle.
El alcalde del poblado municipio, Roberto Contreras, señaló la mañana de este jueves 21 de noviembre de 2024 que al menos 20,000 personas corren riesgo con la actual intensidad de la lluvia y sus consecuencias.
Mientras tanto, en el norte de EE.UU., una poderosa tormenta conocida como "bomba ciclónica" está causando estragos en los estados de California, Oregón y Washington. Con al menos dos víctimas fatales y fuertes lluvias, el fenómeno se intensifica rápidamente, una característica distintiva de este tipo de tormenta. Los meteorólogos han explicado que una bomba ciclónica ocurre cuando la presión atmosférica disminuye en al menos 24 milibares en menos de 24 horas, lo que genera condiciones realmente extremas, en lluvia y viento. Aunque los ciclones tropicales y las bombas ciclónicas comparten similitudes, su desarrollo y ubicación varían: mientras los huracanes se forman en aguas cálidas tropicales, las bombas ciclónicas surgen en zonas de transición entre trópicos y regiones polares.
Estos fenómenos resaltan la vulnerabilidad de los países frente a eventos meteorológicos extremos, exacerbados por el cambio climático. Las autoridades en Guatemala y Honduras han instado a la población a seguir las recomendaciones de seguridad, incluyendo evacuaciones preventivas en áreas de riesgo, mientras que en Estados Unidos de Norteamérica los meteorólogos continúan monitoreando la trayectoria de la bomba ciclónica, cuyo impacto podría prolongarse hasta el 24 de noviembre.
El panorama evidencia la necesidad de fortalecer las estrategias de prevención y respuesta ante el clima extremo, así como de fomentar la resiliencia comunitaria para minimizar las pérdidas humanas y materiales en el futuro. En ese sentido, si usted está en Centroamérica, debe prepararse para un fin de semana lluvioso, exceptuando gran parte de Nicaragua y Costa Rica, por ahora.
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