Luego de incertidumbres, expectativas y tras varias reuniones fuera del país, se anunció el lanzamiento de la Coalición Nacional conformada inicialmente por los dos principales bloques opositores contra la dictadura Ortega-Murillo, la Alianza Cívica y la UNAB. Días antes ambos grupos habían anunciado su separación, una acción que generó muchas confusiones.
En la escena montada en el Holiday Inn se presentó la posición oficial de ésta Coalición enfatizando que tienen como misión principal "reconstruir el país" en términos económicos, políticos y sociales, en un esfuerzo conjunto con todas las fuerzas organizadas y vivas del país en una unidad "ámplia y sin exclusiones" .
Lo que podría considerarse como oferta política de la Coalición ha generado más preguntas que respuestas, tomando en cuenta los principales ejes que proponen. Obviando todo el romanticismo en el documento y las comparecencias, se dijo que buscan impulsar una reforma electoral de cara a las elecciones del 2021, sin revelar el mecanismo que implementarán, tomando en cuenta la voluntad política de la dictadura que a través de sus voceros han manifestado en diversas ocasiones que la sociedad civil no será tomada en cuenta para dichas reformas.
La promesa es reunir a todos los grupos sociales del país, incluyendo a todos los partidos políticos existentes, acto que generará controversias ante las complicidades, ineficacias, apatía y desconfianza que éstos representan.
Durante una entrevista en el programa Esta Semana, Felix Maradiaga de la UNAB y Juan S. Chamorro de la Alianza Cívica se atrevieron a dar más detalles de lo que pretenden realizar; cuando llegaron al punto relacionado a la presión social, algo que durante la conferencia no mencionaron, Maradiaga se limitó a decir que han "insistido en que ésta es una Coalición electoral", y luego añadió que "no estamos renunciando a la presión social en las calles", dejando claro que esa ya no es la prioridad.
"En los próximos días" ha sido la frase de cajón ante los cuestionamientos de los periodistas cuando se aborda un punto de mayor interés lo cual es una forma de darle largas al asunto y esto no hace más que prolongar la crisis. Quienes impulsan la Coalición deben tomar en cuenta que las ambigüedades (comida para troles) y el tiempo nos respira en la nuca.
La Coalición es una necesidad de carácter nacional que debe responder de forma sabia y eficaz a las demandas de una transformación social, por tal razón quienes la integren deben asumir esa enorme responsabilidad y todo lo que esto implica. El país no necesita más siglas.
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