top of page
La magistrada Yadira Centeno González, una leal simpatizante sandinista con más de 27 años en su cargo en la Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), fue desalojada de su oficina por orden de la dictadura de Daniel Ortega. Este desalojo siguió la misma medida aplicada a la presidenta de la CSJ, Alba Luz Ramos, el martes 24 de octubre. La detención de Centeno se realizó en la mañana del jueves 26 de octubre y, al igual que con Ramos, la policía la envió a su casa. Lucía Flores Centeno, abogada e hija de la magistrada, también fue detenida por la policía en este contexto de crisis en la CSJ. La situación plantea preguntas sobre la lealtad y la represión dentro del propio partido gobernante y la institución judicial.
bottom of page